Integristas hindúes protagonizaron estos últimos días, especiamente ayer, protestas violentas en varios puntos del estado occidental indio de Maharashtra tras el arresto del líder nacionalista hindú Raj Thackeray. En Bombay, la capital de Maharashtra y el corazón financiero de la India, un gran número de comerciantes cerró las puertas de sus establecimientos ante los disturbios, según la agencia IANS.
Los seguidores de Thackeray, líder del partido extremista Maharashtra Navnirman Sena (MNS) atacaron también la oficina del portavoz del Partido del Congreso en la región, Sanjay Nirupam. En la localidad de Nagpur, uno de los centros del radicalismo hindú, un centenar de militantes del MNS apedrearon autobuses subidos en motocicletas, según el líder del partido en la región, Hemant Gadkari.El comisario adjunto de Nagpur, B.J. Kangale, confirmó las protestas y señaló que 'no pudieron llevarse a cabo detenciones ya que los hombres huyeron del lugar tras apedrear' los autobuses.
Los radicales han lanzado piedras también contra autobuses en las localidades de Pune, Kothrud y Panvel. Thackeray fue detenido en el distrito marati de Ratnagiri junto a otros líderes de su partido después de que seguidores del MNS atacaran ayer en Bombay a ciudadanos del norte de la India que se presentaban a un examen para entrar a trabajar en las autoridades ferroviarias y mataran a uno de ellos.
El MNS y otros partidos añaden a su celo religioso el ingrediente nacionalista marati (del estado de Maharashtra), por lo que a menudo sus miembros rechazan la inmigración de otras partes de la India, cuya población no habla su lengua. La población del depauperado estado norteño de Bihar, que se ve obligada a emigrar a otras partes de la India, es una de las comunidades más afectadas por los ataques de estos radicales.
Thackeray, que ha sido arrestado por segunda vez en ocho meses a causa de sus arengas contra los indios del norte, es sobrino del carismático Bal Thackeray, máximo dirigente del partido de extrema derecha Ejército de Shiva (Shiv Sena), que gobierna la ciudad de Bombay. El Shiv Shena, del que se escindió la formación de Raj, es uno de los grupos de presión más atentos a cualquier atisbo de desviación de la ortodoxia religiosa hindú y su líder en alguna ocasión ha expresado sus simpatías por el dictador nazi Adolf Hitler.
Fuente: Terra / EFE
1 comentario:
Se utilizan las religiones para un provecho egoísta, para conseguir poder y poder dominar así a otros hombres. Gracias a Dios son muchísimos más los que en su nombre hacen algo por los demás sin pretender ningun poder.
Ahí va mi pequeño GRAN homenaje para todas ellas: Madre Teresa de Calcuta, hermana Emmanuelle y todos los misioner@s que han dedicado o están dedicando su vida en ayudar a los que menos tienen, a los más necesitados, a los enfermos, a los marginados, a cualquiera sin preguntar quién es o de donde vienes. Habéis salvado millones de vidas, espero que sean más que las víctimas del egoísmo del hombre...
Un alma sonriente.
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